Uno de los problemas más comunes en un almacén es la falta de espacio o el mal uso del mismo.
La forma convencional y más segura de operar siempre ha sido tener un espacio dedicado para almacenar las baterías mientras no están siendo utilizadas. Estando allí se realizan trabajos de carga, enfriamiento, descanso o algún mantenimiento según se requiera.
Esto puede impactar tu productividad ya que se está sacrificando un espacio que podría ser utilizado para almacenar tu producción. Además durante el cambio de baterías y su traslado en un rack se requiere una inversión de recursos e implica cierto riesgo de accidentes para el personal.
Para ello hemos creado una lista de recomendaciones sobre lo que puedes hacer para mejorar y cómo podemos ayudarte.
La industria siempre trata de ser más eficiente en el uso de sus almacenes para contar con los recursos indispensables, minimizar la inversión y maximizar resultados.
Para esto hacemos estudios y mediciones de diversas condiciones en la operación para conocer la cantidad de energía que los montacargas o equipos requieren en sus actividades de operación diarias.
La variable principal a medir son los amperes que consumen todas las actividades del día.
Esto nos proporcionará información suficiente para calcular la cantidad de baterías requeridas en el almacén y la cantidad mínima de espacio que debemos destinar al resguardo de las mismas.
En ciertos casos, dependiendo de la industria, es posible eliminar por completo el espacio destinado a baterías, utilizando métodos de carga que los llamamos Carga Rápida y/o Oportunidad, de esta forma aumentamos el área disponible para tus productos de la esencia de tu negocio. Ahora, debemos considerar:
Espacio requerido para Cargadores Rápidos:
De acuerdo a la energía que se consume y las condiciones del entorno de trabajo (intensidad, temperatura, tipo de actividad, etc) se calcula la cantidad de baterías y cargadores de las diversas tecnologías disponibles.
Existen tecnologías de baterías de plomo ácido (abiertas o selladas) para cargas rápidas / de oportunidad que resultan ideales para estos trabajos.
Esto permitirá hacer ajustes conforme se incrementa o reduce la demanda de trabajo y realizar mantenimientos preventivos para alargar la vida útil del sistema.
Realiza un monitoreo constante con datos en línea desde cualquier lugar para corroborar que el sistema está funcionando adecuadamente, evitando temperaturas altas en las baterías, sobrecargas o descargas profundas.
Es importante contar con la retroalimentación de los usuarios para que al pasar un periodo de 1 o 2 mesas se puedan revisar los datos y hacer propuestas de mejora o solo concluir que el sistema está bajo control.
Después se puede realizar revisiones en periodos más largos (cada 6 meses) para comprobar que todo sigue marchando bien.
Contamos con este servicio, mediante el cual:
1. Hacemos una entrevista al cliente para conocer su operación.
2. Visitamos sus instalaciones para realizar la instalación de nuestros equipos de medición.
3. Hacemos un plan de trabajo con los tiempos de entrega de la propuesta y beneficios esperados.
4. Una vez que tengamos los datos se hacen diversas propuestas de acuerdo a las necesidades.
5. Se revisan en una junta para hacer la elección final.
Disminuir tus espacios para baterías de montacargas es una gran oportunidad para incrementar el ROI de tu operación.
La implementación de un sistema de carga rápida permite reducir la inversión a corto plazo, lo que ayuda a mejorar tu liquidez como empresa.
En Primer Power brindamos consultoría, asesoramiento y todos los equipos requeridos para la operación de estos sistemas, además de contar servicio post-venta que asegura que el sistema esté funcionando adecuadamente.